LA VERDAD

LA VERDAD: Estudiamos el texto ubicado en Romanos 1: 18 que dice: “Porque la ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los hombres que detienen con injusticia la verdad”.

El término griego para impiedad es Asebeia y está compuesto de 2 elementos; la letra “a” que tiene carácter de negación y el término “sébas” que traduce “cosa sagrada”. Literalmente resultaría entonces repudio o negación de lo sagrado.

Asimismo el término griego para injusticia “Adikian” que traduce como “ser favorable a “, en el sentido de alguno que tiene una gran inclinación por alguien o por algo. Es la misma significación de “tener un vicio” o “ser esclavo de algo”. Es pues la “injusticia” una forma de esclavitud.

Entonces quienes combinan ambos temas (impiedad e injusticia), son quienes detienen la verdad. Ellos niegan a Dios y son esclavos de algo.

La verdad se dice en el original griego “Aleteia” y es todo aquello que no está oculto, que se muestra claramente. Así pues cuando algo queda ocultado, entonces es una mentira.

Quienes niegan lo sagrado (claramente a Dios) y son esclavos de algo (el pecado, por ejemplo), ocultan la verdad de Dios e impiden que las gentes la conozcan.

Satanás hizo esto cuando habló con Eva: “¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?” La verdad que sólo estaba prohibido comer de un árbol, quedó oculta tras la mentira de que no podían comer de todos los árboles.

Cada cosa en esta vida nos oculta la verdad. Por eso Dios envió a Su Hijo, para contarnos la verdad del Padre (Juan 8:26). De hecho el mismo Yahshúa es la verdad (Juan 1: 14; Juan 14:6) hecho persona y la palabra que nos contó, que es palabra de Dios, es verdad (Juan 17:17).

Por ello Satanás procura que las gentes no lean las Sagradas Escrituras, porque si lo hacen conocen la verdad y ya nos son esclavos (adikianos) , sino libres (Juan 8.40). Entonces plantea en el mundo la pregunta falsa (¿de todos los árboles o de un único árbol?) y así nos oculta la verdad.

Lo que conocemos como estilo de vida o costumbre, que las Escrituras llaman “corriente de este mundo”, ocultan la verdad de Dios. Son los enemigos de Dios (quienes niegan lo sagrado) y están inlcinados hacia el enemigo de Dios, quienes tapan la verdad.

Así pues el trabajo, los estudios, las investigaciones, la tecnología, etc son formas de hacer la falsa pregunta, porque separan al individuo de conocer la verdad.