YO DECLARO...QUE DECLARAR ES DEL DIABLO


Allí estaba “el pastor” con esa voz engolada hablando suavemente, cuidando con mucha cautela el tono de su voz, y las inflexiones que debía darle, para que produzca el efecto esperado. Hablaba sobre la importancia de orar, y como esto “nos acerca a Dios”. Mientras le veía pensaba que quizá yo estaba equivocado, en mi posición acerca de él, y de los que son junto con él, en su clan de “iglesia moderna”. Sí, porque la verdad es que les tengo como “predicadores Illuminatis”.
Hace cierto tiempo pude entender este verdad y desde ese momento me acompaña, y gracias a Dios que la Escritura lo confirma. Pedro, Pablo y Judas hablaron acerca de estos hombres de los últimos tiempos, que por fuera se visten de piedad, pero por dentro son lobos rapaces, cuyo dios es el vientre… y el dinero, la fama y el poder.
Decía pues que allí estaba el hombre, apelmazando su discurso con su voz muy armoniosa, su cabeza calva, su acento argentino y su esposa al lado. Ambos lideran una iglesia de 14.000 miembros. No, no me equivoqué, ni coloqué un cero de más. Tienen catorce mil miembros, a los cuales deben atender en algo así como 8 servicios, comenzando desde el sábado, en un terreno de Belgrano, ciudad Argentina. Y el invitaba a la gente a orar.
Y yo decía alguien que invita a los demás a orar a Dios, no puede pertenecer al bando de los chicos malos del Nuevo Orden Mundial, masónico – Iluminatis, que conforman la bestia misma.  El caballero de “justo a tiempo”, pasó del estudio desde donde se llevaba a cabo el programa diario, a una grabación “de un servicio” previo, en donde la enorme multitud, ratificaba el liderazgo de este hombre, que a cada rato invitaba a las personas a levantar las manos. Mientras con esa vocecita azucarada (en demasía) hablaba y hablaba, y decía cosas y cosas, y a veces no teniendo más que decir, repetía las mismas cosas dichas previamente.
Sus brazos estirados colgando como péndulo se movían desde atrás de su cuerpo hacia adelante, como quien empuja algo que está en él, o alrededor de él, para que alcance a los que están lejos, mientras decía “recibe la unción”, “recibe la unción”. Es decir “la unción” salía de él y debía envolver a la multitud. Mientras tanto la gente lloraba, en éxtasis. Es la nueva generación de “ungidos”, que lideran una iglesia negligente y dormida, que no se da cuenta de la verdad.
Después de esto regresamos al programa inicial, donde el hombre junto a su esposa, sentados con las piernas cruzadas, recordaban el momento presentado en la grabación, y decían que ese fue uno de los momentos de “mayor gloria” vividos, y que la presencia (¿?) del Espíritu Santo se hizo sentir ese día. Llegando al final del programa dijo que se disponía a orar, por todos los que tenían una necesidad.
Abrió su boca y dijo: “Declaro…”. Debo reconocer que mi ansiedad crecía, porque tenía un gran conflicto dentro de mí ¿Sería cierto que este hombre es un piadoso, y que yo estaba equivocado? Pero el inicio de su oración lo confirmo todo. No dijo, por ejemplo, “Padre de los cielos, grande y misericordioso, que te complaces en el bien de tus santos…”etc. No. ÉL dijo: “Declaro…”
El Señor Yahshúa en una oración dijo: “Padre mío, si es posible…”y en otro momento: “Te alabo, Padre, Señor del cielo…” Es decir es imposible comenzar a orar si primero no glorificas al Padre. Cuando el Señor Yahshúa enseñó a orar a sus discípulos les dijo: ”Vosotros pues oraréis así: “Padre nuestro que estás en los cielos…”. Si uno se va a dirigir al Padre en oración, debe declarar Su Gloria. A menos que uno no esté hablando con el Padre, lo cual haría de la oración cristianamente entendida, otra cosa.
Y esto es, precisamente,  lo que hizo “el pastor” de Belgrano, y es lo que quiere enseñar a sus seguidores, y por eso se esfuerza en pedirle que oren.  Esta es una oración según la Nueva Era. Es una oración basada en el yoismo, y la egolatría humanista que predica Satanás y su gente. No es una oración según Yahshúa nos enseñó. Declarar es una de los principios básicos, de los participantes en las escuelas satánicas de  “Lucis Trust”, dirigida por la luciferina Alice Bailey,  y se basa en el poder de la palabra de quien declara, en el entendido que todos pueden actuar como dioses, porque según ha enseñado el demonio, por ser a imagen y semejanza de Dios esto es posible.
Según las enseñanzas recogidas por los judíos tradicionalistas, que aparecen en el Targum Pseudo Jonathan, esto fue precisamente lo que le dijo Satanás, siendo culebra a Eva. Se cuenta que Satanás no se mostró a Eva, sino como serpiente, hasta que le dijo: sabe Dios que el día que de él comáis seréis como dioses…” Según el Targum la palabra usada para dioses fue “grandes ángeles”. En el momento que decía eso se transformó en lo que él era cuando aún no había sido expulsado del Edén, el día de su creación, lo cual aparece en Ezquiel 28. Y luego esta historia dice que Satanás le dijo a Eva, que al ser como dioses podrían crear mundos y universos como Dios había hecho, pero que Dios no quería que ellos fueran dioses (grandes ángeles) para que no compitieran con Él, y por ello no quería que comieran del árbol.
El ser como dioses ha impregnado a la humanidad, desde el origen, y Satanás sabiendo que al hombre le agrada esto, ha procurado enseñarle que puede lograrlo. “Declaro…” significa que con mis palabras puedo cambiar un orden establecido, y aceptado como natural, por uno nuevo, que cambia lo conocido por uno renovado, producto de las palabras que he dicho. Lo que viene después de “Declaro…” es lo que requiere ser cambiado. Por eso el pastor de Argentina dijo “Toda enfermedad que les aqueja, el problema financiero que estás sufriendo, el divorcio, la separación de la familia, la pobreza”. “Declaro que toda enfermedad se convierte en salud, que toda deuda será saldada, que los esposos encontrarán amor por su pareja, y que las familias se perdonarán”.  Y  sus fieles creen (porque esto es lo que les han enseñado, y nunca han sido diligentes para buscar si esto es verdad o no), que después que estas palabras han sido dichas, las cosas de verdad cambiarán. Satanás se encarga de que sean cambiadas, para que las gentes crean.    
Es el poder de la palabra del semidios que está hablando, frente a la naturaleza de las cosas. ÉL nunca dijo “Padre del cielo, declaró que tú eres Dios y reinas sobre todas las cosas…”. No lo hizo porque su oración no iba dirigida al Padre Creador, sino a él mismo, y en primera instancia (aunque no aparezca explícito) al demonio. Satanás ha enseñado siempre a desligarse de Dios, y a no depender de Él, y la oración de las iglesias modernas masónicas – Illuminatis, llevan al creyente a esto. Pero cuando Yahshúa enseñó a orar dijo que la primera palabra a decir sería Padre nuestro que estás en los cielos. Esto hace que quien ora se vuelva dependiente de Dios.
Escuchando la oración del pastor engolado de Argentina, pude entender porque invitaba a la gente a orar. No les enseñaba a depender del Padre, sino a actuar por sí mismos. Este es el propósito de las iglesias modernas, ajenas a la iglesia neotestamentaria. Es la iglesia del empoderamiento y de la fe de 4ta dimensión. Es la iglesia de Satanás, la del tiempo del fin. No seas parte de ella. Sal de allí.



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